La decisión de Health and Human Services (HHS) de demandar a Gilead por infracción de patente en Truvada y Descovy PrEP es un paso fundamental para proporcionar acceso a una prevención eficaz del VIH a todo aquel que lo necesite.

La conducta de Gilead es desmesurada y ha tenido consecuencias desastrosas. En la demanda, el HHS lo explica claramente: "La conducta de Gilead fue maliciosa, gratuita, deliberada, conscientemente errónea, flagrante y de mala fe".

Truvada como PrEP y Descovy como PrEP son extraordinariamente eficaces: su uso diario se asocia a una reducción del 99% del riesgo de contraer el VIH. Durante casi una década, los precios abusivos de PrEP por parte de Gilead han impedido a cientos de miles de estadounidenses acceder a esta medicación que salva vidas, a pesar de estar financiada con el dinero de los contribuyentes. Como resultado, casi no se ha avanzado en la reducción del número de nuevos diagnósticos de VIH en Estados Unidos. 

"Aunque la acción de ayer es importante, la demanda por sí sola hará poco para aumentar el acceso a PrEP. El gobierno debe utilizar ahora estas patentes para hacer llegar PrEP a todo aquel que la necesite y crear un programa universal de prevención del VIH que alivie todas las barreras que perpetúan la epidemia del VIH", afirmó James Krellenstein, activista contra el VIH/sida y cofundador de PrEP4All Collaboration. "Esta medida no costaría ni un céntimo a los contribuyentes".

Los derechos de autor actuales -cuyo valor se estima en al menos 3.000 millones de dólares- son más que suficientes para poner PrEP en manos de todo el que la necesite de forma gratuita si el coste se redujera a un precio genérico razonable, como ocurre en muchos otros países. También es suficiente para cubrir los programas de educación y divulgación diseñados para derribar las numerosas barreras estructurales y sistémicas que impiden a las comunidades de mayor riesgo acceder a una prevención eficaz del VIH. 

Si el gobierno realmente quiere acabar con la epidemia del VIH con rapidez, utilizará esta demanda como trampolín para crear un programa nacional de prevención del VIH verdaderamente universal.